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¿Es recomendable la remodelación de apartamentos antes de venderlos?

La remodelación de apartamentos, por lo general, es algo que acostumbramos hacer para mejorar espacios o simplemente transformarlos por completo. Pero si tienes un apartamento y estás pensando venderlo pronto, te preguntas algo muy importante: ¿Vale la pena remodelar el apartamento si lo voy a vender? En nuestro artículo de hoy, te ayudaremos a evaluar si realmente hacer ese gasto vale la pena, y de ser así, cómo influye positivamente en la venta de la propiedad.

Si estás considerando un proyecto de remodelación de apartamentos, pregúntate: ¿Es el momento? ¿Vale la pena el esfuerzo y la inversión? ¿Obtendré un beneficio, o sólo lo estoy haciendo por el placer de ver el resultado final?

Remodelación de apartamentos

Antes de vender una propiedad, algunas personas consideran remodelarla para aumentar su valor o simplemente hacerla más atractiva.

Para tomar una decisión informada sobre si la renovación es idónea o no, el primer paso es calcular el valor actual de tu propiedad.

Siempre es importante contar con la ayuda o el asesoramiento de un agente de bienes raíces, ya que en materia de avalúo, el agente de bienes raíces tiene amplio conocimiento.

Las casas y apartamentos, al momento de ser vendidos, generalmente mantienen la misma estructura que tenían cuando fueron construidos. Sin embargo, algunas personas ven como buena idea remodelar la propiedad con la finalidad de venderla a mayor precio, o hacerla más atractiva en el mercado.

¿Eres de las personas que está interesada en la remodelación de apartamentos o casas? Te presentamos cuatro pasos a seguir para sacar el mejor provecho a la venta de la propiedad.

1. Calcula el valor actual de tu casa

Es muy importante que, antes de una remodelación para venta, contactes a un agente de bienes raíces, ya que él te puede dar una idea aproximada o puedes solicitar formalmente un avalúo. Los costos de las propiedades en Panamá son variables. Sin embargo, hay varios proyectos de vivienda en Panamá con bajos costos por estar en “obra gris”.

Se debe tomar en cuenta la localización del inmueble, los metros cuadrados, el tiempo de uso, la calidad de los acabados y el mantenimiento.

2. Investiga cuánto valdría tras la remodelación

Después de conocer cuánto vale la propiedad sin haber sido modificada o remodelada, el siguiente paso es averiguar en cuánto se vendería después de hacerle las mejoras. Para esto, se recomienda la ayuda de un agente de bienes raíces.

De igual forma, puedes hacer una comparación con inmuebles de tamaño similar al tuyo y que se ubiquen más o menos en la misma área. Lo ideal es que esas viviendas hayan sido remodeladas o que, por lo menos, tengan mejores acabados que los de tu casa (sin haber pasado todavía por el proceso de remodelación).

3. Haz tu presupuesto

La remodelación de apartamentos, o en este caso, de tu vivienda, no sólo ayuda a optimizar tu comodidad, a veces con una inversión de 10% del valor la propiedad, sino que se puede aumentar el valor del mismo hasta 40%. Pero para ello, debes manejar tus recursos de forma inteligente.

La calidad y el tipo de acabados, determinarán ese incremento, aunque también dependerá de la zona remodelada: Por ejemplo, la cocina y el baño son puntos clave, pero hay que tener mucho cuidado. Es necesario que te plantees si la renovación que tienes planificada sobrepasará el valor de la vivienda.

Es preciso saber cuánto dinero deseas gastar en la remodelación. Quizá ya tengas un aproximado de los gastos, pero si no es así, lo más recomendable es que analices qué es lo que se va a modificar y cuánto capital se puede llevar.

Dentro del presupuesto que vas a hacer, debes incluir cotizaciones de mano de obra y de los materiales que se requerirán. No olvides que al momento de solicitar varias cotizaciones, también hay que tomar en cuenta el plazo de garantía que te ofrezca cada una.

4. Realiza el cálculo

Existe una opción que te puede ayudar: El beneficio potencial de los resultados de renovación se puede resolver con la siguiente fórmula: Valor potencial de la propiedad renovada, menos el valor actual de la misma, menos los costos estimados de remodelación, menos otros costos (como los seguros, los costos de operación y los gastos de venta). Esto es igual al beneficio o la equidad potencial.

A pesar de que suene difícil hacer la ecuación, es un valor que debes conocer para tomar una decisión informada. Recuerda que el beneficio resultante, cambiará si inflas el costo de remodelación o si calculas mal el valor potencial de tu propiedad. Por eso, lo mejor es establecer contacto con profesionales del rubro, agentes inmobiliarios, un contratista y hasta con varios proveedores para asegurar que tu estimación sea tan confiable como sea posible.