Vivir en Centroamérica se ha considerado, por muchos, como el lugar perfecto si lo que buscas es un costo de vida bajo. Países como Panamá, Nicaragua o Belice, llaman mucho la atención por sus bajos costos en comparación con Estados Unidos y Canadá. Pero, ¿vivir en Centroamérica es realmente más barato? Y si es así, ¿qué tanto más económico puede llegar a ser?

Vivir en Centroamérica – Datos Gogetit

* En países como Panamá, expatriados norteamericanos consiguen muchas ventajas, tales como el clima, el costo de la vida y el precio de propiedades para venta o alquiler.

* Un estudio titulado “Informe Expat: ¿Es más barato vivir en el extranjero?”, señaló que el 43,1% de 400 expatriados encuestados, informó que el costo de vida en Centroamérica fue de 25% a 50% menos que en su país de origen.

* En general, los expatriados encuestados se aprovecharon de la extrema diferencia en el costo del servicio doméstico mediante la contratación de empleadas domésticas y jardineros, de manera mucho más fácil que los que tendrían en su país de origen.

Al vivir en Centroamérica, una de las cosas que refleja los bajos costos, es el precio de las viviendas. En el caso específico de Panamá, las propiedades en áreas del interior del país, como Boquete, suelen estar más económicas que lo que pudiera costar una casa en Texas, Estados Unidos.

Este caso particular, es el de uno de los encuestados, quien aseguró que “Tomaba más de U.S.$ 2,400 al mes para vivir en una ciudad en Texas, que en ese momento era un 25% menor que el promedio de costo de vida en los EE.UU. Aquí en Panamá, podemos hacerlo por U.S.$ 1,600 con facilidad.” Es por esto, entre muchas otras cosas, que vivir en Centroamérica suele ser bastante atractivo para muchas personas.

Entre los residentes extranjeros de Nicaragua, el 60,5% dijo que el costo de la vida se produjo la mitad o menos de lo que cuesta en su país de origen. El porcentaje fue del 45,3% para Belice y 19,9% para Panamá.

Varias categorías de gastos, ayudaron a sacar cuentas por un costo de vida más bajo, y en algunos casos, había una falta de ciertos gastos. Los ejemplos incluyen el pago de electricidad o (en algunos casos) los impuestos de propiedad.

El caso de un norteamericano encuestado, Roy Cannon, quien ahora vive en Panamá desde hace 10 años, explicó que “en relación con la posibilidad de comprar más cosas, aquí en Panamá puedo costear la casa, (incluyendo ayudantes) por menos de lo que cuesta mi factura de servicios públicos e impuestos en los Estados Unidos.